En su libro,"The Trump Card: Playing to Win in Work and Life" publicado por Touchstone en 2009 cuando la Ivanka tenía 27 años, habla de la representación de "El Cascanueces" junto a sus compañeros de la escuela de ballet y la asistencia de Michael Jackson, que por entonces vivía un piso por debajo de ella en la Trump Tower.
Ivanka interpetando El Cascanueces hace casi 30 años
"De alguna forma Michael se enteró de la inminente representación de El Cascanueces y expresó su interés en asistir. Es posible que sólo lo hiciese para ser correcto, pero conociendo la afinidad de Michael para el baile, creo que era más que probable que estuviese realmente interesado. Así que mi padre le consiguió una entrada.
Cuando llegó el día de la actuación, parece que se corrió la voz de que Michael Jackson planeaba asistir. Eso fue genial hasta que también se corrió la voz de que yo tenía algo que ver con ello. Naturalmente los niños se volvieron como locos. Yo también estaba encantada pero menos según se acercaba la actuación. Uno de los bailarines mayores tuvo la idea de que debíamos salir todos con un guante blanco en nuestra mano izquierda mientras bailábamos El Cascanueces para honrar a Michael. Bonito e inofensivo, ¿verdad? Yo no lo veía así, de hecho, estaba mortificada. Estaba convencida de que ese homenaje paralelo podría comprometer la santidad de El Cascanueces y yo acabaría siendo señalada como la culpable.
Los instructores compartían mi preocupación. De hecho, se pusieron furiosos y preguntaron quién había sido el responsable de boicotear su pulcra producción. El bailarin adolescente que había tenido la idea y sus amigos se acobardaron y no dieron la cara. Todos los mayores corrían frenéticos como locos por el backstage, y yo estaba segura de que yo sería la responsable de aquel desastre.
Por un momento deseé profundamente haber nacido en otras circunstancias, lejos de la fama, pensaba que todo iba por mi aunque no fuese así. Por suerte nadie me culpó. El enfado se pasó. Bailamos dandolo todo.
El Cascanueces salió indemne. La vida continuó en nuestro pequeño y precioso rincón de Nueva York. Y ahora, mirando atrás, lo veo como un recuerdo dulce y único de un artista tan icónico, aunque en aquel momento añadí una buena parte de angustia adolescente a la anécdota.
P.D. A Michael le encantó el espectáculo.
*Traducido por Xtarlight y Mpenziwe para www.MJHideOut.com
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Me supongo que todos se sintieron privilegiados de bailar para Michael, me imagino la emoción, y.bueno se hubieran atrevido a cometer el "pecado" del guante, creo que todo el público entendería que estando semejante personaje, había que hacerle un MERECIDO homenaje:bye: