Cuecas, griterío y desorden: así fue la llegada del rey del Pop a Chile
Octubre, 1993. Chile. En aquellos días se promocionaba la película nacional Johnny cien pesos, mientras Robocop 3 era la novedad del cine anglo. La Tercera costaba $200 de lunes a sábado y La Cuarta tenía un valor de $140 en los mismos días. Un pasaje en la intercomunal 24 (San Bernardo, paradero 25 de Gran Avenida, Plaza Egaña, Américo Vespucio) valía $120. Los smartphones no existían. En desmedro de ello, solo algunos afortunados tenían teléfonos satelitales, los cuales tenían un tamaño desproporcionado para la tecnología que conocemos actualmente. Y algo no menor: la industria musical podía gestionarse en base a la venta de cassettes y CDs.
Tras el fin de la dictadura, Chile comenzaba a abrirse al mundo. Los recitales eran muestra clara de ello. Unos años atrás, en 1989, Rod Stewart marcó la senda a seguir en cuanto a presentaciones musicales venideras.
La productora nacional Prodín, encabezada por su dueño Ernesto Clavería, fue quien trajo a Stewart a Chile y quien se aventuró de ahí en adelante con los megaconciertos. Según Clavería, había un artista que era el tope de línea, alguien que podría ser consagratorio para su carrera al mando de Prodín: Michael Jackson.
El lunes 18 de octubre de 1993, a las 17:15 horas, Michael Jackson aterrizaba en el Aeropuerto Internacional Comodoro Arturo Merino Benítez, en Pudahuel. ¿El motivo?: el “rey del Pop” venía a realizar dos presentaciones en Chile, las cuales estaban enmarcadas dentro de la gira promocional del álbum Dangerous, tour que lo llevó por Europa, Asia y Sudamérica, en este último caso Argentina y Brasil.
Al abrirse las puertas del avión privado, los primeros en descender fueron algunos guardias de seguridad junto a tres niños, quienes acompañaban a Jackson en la comitiva. Uno de ellos intentaba tapar su rostro con el sombrero que traía puesto.
Posterior a ello, la silueta de la estrella musical comenzaba a mostrarse y los gritos en Pudahuel aparecieron de golpe.
Pantalón negro, camisa roja, lentes y sombrero. Así se presentó Michael Jackson en su primer día en Chile. Al bajar la escalera del jet, usó una sombrilla blanca para atenuar los efectos del sol en su piel.
Algunos niños esperaban al músico en la pista de aterrizaje. Dos de ellos eran hijos de Ernesto Clavería, dueño de Prodín, la productora a cargo de los shows de Jackson en Chile, según afirmaba La Tercera al día siguiente.
A unos metros de distancia, tres parejas del Bafochi lo recibieron con un esquinazo.
Luego de ello, el desorden: MJ caminó por el aeropuerto junto a efectivos policiales, quienes formaron filas a los costados del músico. Fotógrafos y camarógrafos se abrieron paso para tener la mejor imagen, mientras los fanáticos que acudieron a ver a su ídolo gritaban desesperadamente.
Óscar Águila, coronel en retiro de Carabineros de Chile, fue parte del equipo de Fuerzas Especiales que recibió al intérprete de “Billie Jean”. Al recordar aquel momento, afirma que el público estaba compuesto mayoritariamente de niñas y adolescentes.
“En el caso de Michael Jackson, estaba lleno el aeropuerto varias horas antes de que él arribara”, complementa el exfuncionario policial sobre la reacción que generó el rey del Pop en su llegada, asegurando que ni con Madonna se generó tal nivel de expectación.
Las primeras actividades que tenía Jackson en Chile eran una visita a niños con leucemia y realizar una presentación el jueves 21.
Sin embargo, nada de ello ocurrió.
El extraño ambiente que marcó el primer recital suspendido de Jackson en Chile.
Distintas versiones sobre el estado de salud del cantante y bailarín circularon apenas se supo de la cancelación. Los productores aseguran no haber visto impedimentos físicos en Michael que lo llevasen a tal decisión.
“A todo ritmo irrumpirá esta noche MICHAEL JACKSON”. Así titulaba La Tercera una de sus páginas en la edición del jueves 21 de octubre de 1993, calentando motores para el primer gran espectáculo que tenía preparado el rey del Pop en nuestro país.
200 trabajadores ya habían terminado de montar un escenario de 68,4 metros de ancho por 28 de fondo, ocho sistemas láser, torres de iluminación y sonido de alta calidad. Todo estaba listo para dar el vamos a las fechas en Chile del Dangerous World Tour.
La gente se congregaba en el Estadio Nacional, muchos de ellos incluso venían de regiones para ver el espectáculo. Algunos de los asistentes hacían ingreso a las distintas ubicaciones del recinto. Todo parecía normal aquel jueves.
Sin embargo, inesperadamente hubo un cambio de planes.
El llamado de Mylena
“Si me preguntas sobre el momento más difícil, fue cuando tuve que llamar por teléfono a Ernesto (Clavería, dueño de Prodín) para decirle que Jackson no iba a cantar y se suspendía el concierto”, cuenta la productora general del evento en Chile, Mylena Rock.
Clavería cuenta que en ese momento estaba sentado en el lobby del hotel y complementa el relato de Mylena recreando el diálogo entre ambos.
MR: ¿Estás sentado?
EC: Sí, estoy sentado.
MR: Jackson va a cancelar.
EC: ¿Y por qué?
MR: Por razones médicas.
EC: ¿Definitivo?
MR: Definitivo.
Tras la noticia que le entregó Mylena, Ernesto Clavería solicitó a Roberto Espejo, jefe de seguridad que estaba en el Estadio Nacional, detener el ingreso de gente al recinto, dejando a un grupo de los asistentes dentro de este.
Así, cerca de las 16 horas se comunicó al público que el recital no se realizaría debido a problemas de salud del cantante, sin especificar exactamente qué le aquejaba.
Pese a que no hubo desmanes, el descontento fue generalizado. Comida y vasos plásticos fueron lanzados al escenario, en señal de molestia.
“Nosotros vinimos desde Viña y gasté mucha plata en las entradas y los pasajes. Ahora no puedo volver el lunes porque tengo otros compromisos. Además, quién nos asegura que este ‘negro’ cumpla con su promesa, capaz que se vaya y nos deje a todos plantados, igual como hizo con los niñitos con leucemia”, afirmó una asistente al recital a La Tercera.
Razones dispares
El primer motivo que se dio a conocer respecto de la cancelación fue una presunta intoxicación con agua mineral. Sin embargo, con el correr de las horas el médico de Jackson junto a Ernesto Clavería de Prodín dieron una declaración oficial. En ella afirmaban que el cantante arrastraba un desgarro en la espalda que se le produjo durante un show en Sao Paulo.
“Lo habíamos visto bastante bien, jugando, subiendo y bajando de la van. En ningún minuto nos dio la impresión de que tuviese una afección en la espalda”, cuenta la productora Mylena Rock.
María del Pilar Calvo, ex gerenta de habitaciones del Hotel Hyatt, fue entrevistada por TVN el pasado 13 de octubre, en un reportaje sobre la visita de Jackson a nuestro país. Ahí, ella entregó otra versión sobre la cancelación del primer recital: el intérprete de “Beat It” habría pasado las puertas de seguridad donde se hospedaba, quedando encerrado en las salidas de emergencia. “Ahí estaba Michael Jackson llorando, acurrucado el pobre, porque estaba asustado. Como una crisis de pánico. Lo subieron a la habitación y él estaba en estado de shock. Ahí se canceló el concierto”, afirmó la trabajadora a la estación televisiva.
¿Cómo solucionar el entuerto? Desde la organización se trabajó en la opción de mover la presentación para el lunes 25 de octubre. Sin embargo, desde Carabineros fue descartado. El general director de la institución, Rodolfo Stange, afirmó a la prensa que “no está considerada otra planificación para otro día”, dejando las esperanzas de los fanáticos puestas en el sábado.
Visitas incumplidas a niños enfermos: la polémica que le generó detractores a Jackson en Chile.
El artista tenía presupuestada una visita a un hogar de pequeños con leucemia, la cual canceló en dos ocasiones. Algunos seguidores rompieron entradas del show en señal de rechazo.
Dentro de las actividades programadas que tenía Michael Jackson en Chile previo a su primer recital se encontraba una visita a niños leucémicos en la Fundación Oncológica de Las Condes.
Así, el martes 19, cerca de 100 niños acompañados de sus madres y padres llegaron a un centro de eventos en Las Condes. Esperaban desde temprano por la aparición del “Rey del Pop”. Estuvieron por horas pero el artista no apareció.
Pese a lo sucedido, se esperaba que Jackson pudiera asistir el miércoles. Por ello se congregaron en el mismo lugar niños, padres y encargados de la Fundación. Estuvieron por horas en el mismo lugar. Sin embargo, la escena del día anterior se repetía: no llegó el ídolo musical.
¿Alguna razón de su ausencia? El cantante habría afirmado que el frío del día le hizo cancelar su visita, lo que molestó a los asistentes.
“La gente lo tomó como una falta del respeto hacia el país”, recuerda Mylena Rock, productora general de Prodín a cargo de la visita de Jackson en Chile.
Loreto López, de 23 años en aquella fecha, fue quien representó mejor el descontento de los seguidores de Jackson en Chile: en los alrededores del Hotel Hyatt rompió su entrada, una tribuna numerada sector Pacífico, a ojos de la prensa. “Me afectó ver las caritas llorosas de los pequeños”, afirmaba la joven, declaración que recogía La Cuarta.
La imagen de Jackson, quien fue recibido como un ídolo, comenzaba a revertirse en algunos sectores, algo que se acrecentaría con la suspensión de su primera presentación en Santiago. ¿Cómo enmendar la situación entonces?
Plan B
Mylena afirma que lograron conseguir una visita al Hospital Luis Calvo Mackenna, la cual se realizó la tarde del viernes 22. Ahí, Jackson estuvo cerca de 20 minutos con 17 pacientes, con quienes se fotografió.
“Los niños quedaron felices, pero igual hubo una protesta de la gente para que él se fuera, porque se habían quedado enojados por lo que ya había pasado”, cuenta la productora Mylena Rock.
Tanto la entrada como la salida del artista fueron caóticas, pues la mayoría de los trabajadores del recinto hospitalario lo recibieron con hostilidad. Abucheos y pulgares hacia abajo eran parte de las postales de aquel momento, aunque por otro lado había fanáticos que llegaron a verlo.
Roces con la prensa
Los medios de la época tildaron de lavado de imagen la visita de Jackson al Calvo Mackenna.
A su vez, una conferencia de prensa convocada el jueves en el Hotel Hyatt, en la cual participarían los músicos de MJ, terminó siendo desertada por los periodistas, acusando manipulación informativa por parte de la jefa de prensa del cantante.
Días después, la crítica de espectáculos Yolanda Montecinos afirmaba que “Plácido Domingo no pierde su vida en desplantes de divo, porque lo es por calidad artística y profesional”, criticando Jackson por cancelar sus visitas a niños enfermos y suspender el primer show.
[Continúa]